Texto Monográfico: Características, Estructura y Ejemplos

La forma más frecuente de presentar el resultado de una investigación es a través de un texto monográfico, también llamado simplemente monografía. Este puede estar escrito por uno o varios autores y posee características que determinan su estructura.

Sin duda este es uno de los tipos de textos más utilizados a nivel académico, pero, aun así, muchas personas desconocen sobre este y cometen errores durante su elaboración. Por este motivo, hemos preparado este artículo, donde te contaremos todo al respecto, desde su definición, sus tipos y características, estructura y algunos ejemplos cortos.

Es muy importante que conozcas sobre los textos monográficos, pues son necesarios especialmente en el ámbito académico. Aunque saber sobre este te ayudará también a nivel profesional en tu vida más adelante.

Una vez dicho todo esto, pasaremos a abordar todo sobre los textos monográficos, comenzando por su definición. Y es importante no confundirlo con el texto enciclopédico.

¿Qué es un texto monográfico? Características principales

Llamado también tratado académico o simplemente monografía, es una especie de libro o ensayo en el cual se detalla toda la información relacionada con un único tema específico. Además, presenta la peculiaridad de que, pese a que está diseñado para entenderse como uno solo, en ciertas ocasiones puede incluso convertirse en distintos volúmenes.

su definición nos cuenta que este va a presentar todos los datos que promueve el campo en el que el autor se desarrolla. Además, tiende a seguir un patrón preestablecido sobre su contenido. Y como te mencionamos, hay ocasiones especiales en las que la monografía es escrita por una colaboración de personas.

Y ahora que conoces a detalle su definición, debes saber que este presenta una serie de características que definen su estructura y nos permiten reconocerlo. A continuación, te contamos algunas de las más importantes.

• Es imparcial, por lo que el autor deberá mostrar toda la información y análisis que rodea el tema que se trata sin sesgar ningún dato.
• Posee en sus características que sintetiza toda la información que existe sobre el tema que se trata para estructurar mejor.
• Trata un único tema, evitando siempre en la medida de lo posible divagar en otros asuntos que no competen.
• No tiene un límite en cuanto a su extensión, sino que, de acuerdo a la cantidad de información disponible, tomará más tiempo de realizar y también será más largo.
• Si bien es cierto que redactar con la colaboración de alguien puede suponer ideas frescas, también supone un reto y es difícil por los conflictos de posiciones que puedan surgir. Por ello es de autoría individual.

Estas son algunas de las características que poseen los textos monográficos y que nos permiten reconocerlos. Pero no es todo, pues también existen varios tipos dentro de estos.

Tipos de textos monográficos

Como ya te adelantamos, estos pueden evidenciarse en varios tipos, no solo si es un texto digital o impreso, donde cada uno de estos va a tener características propias. A continuación, te contamos cuáles son.

Periodísticos

Se diseñan con la intención de alargar y profundizar sobre investigaciones periodísticas, pero también tocan temas desde la ética.

Científicos

Son los que exponen de manera extensa toda una estructura clara y organizada, haciendo uso de pruebas, evidencias y demás elementos que validan científicamente el contenido.

Escolares

Como su nombre lo indica, son aquellos que se crean con la finalidad de diseñar un trabajo de investigación para la escuela.

Generales

Por último, tenemos los generales que se encargan de abordar temas interesantes para la gran mayoría de personas, siempre apegándose a normas básicas. Es uno de los tipos más utilizados.

Estructura y partes de la monografía

La monografía posee una estructura bien definida dividida en partes que organizan la información de manera adecuada y nos brindan un contenido claro y de calidad.

Además de esto, la estructura sirve para permitirnos reconocer un tipo de texto monográfico o monografía. A continuación, te detallamos cuáles son sus partes.

El planteamiento

La primera de las partes que componen su estructura es el planteamiento, donde se identifica el propósito de la investigación y la pregunta que se desea responder.

La identificación y la hipótesis

Luego, en su estructura, tenemos la identificación donde se determinan los resultados que se desean alcanzar y posteriormente se realiza una hipótesis que deberá ser validada o rechazada por evidencia.

Las referencias

Otra de sus partes son las referencias, pues son los recursos y fuentes que usa el autor para profundizar más sobre el tema. Este contenido que ha usado le ha ayudado a alcanzar la conclusión del tema tratado.

La autoría

Ya mencionamos que una única persona actúa como autor en una monografía, aunque durante el proceso de investigación es posible que haya colaborado con otro investigador. 

La revisión

Redactar una monografía toma mucho tiempo, especialmente cuando el tema es complejo. Y luego de que el autor la ha terminado, esta debe someterse a una fase de revisión donde se analizará toda la información expuesta por los colegas del mismo campo.

La publicación

Si todo está correcto con la estructura utilizada y el contenido de la monografía, esta procederá a ser publicada.

Ejemplos cortos de textos monográficos

La mejor manera de comprender toda la información que hemos plasmado en este artículo es mediante ejemplos cortos que nos permitan entender con mayor facilidad tan utilizando no solo en el ámbito académico sino también científico.

Entre los ejemplos cortos podríamos mencionar el monográfico de la universidad, el cual se enfoca en distintos aspectos de la historia. Podría ser tal vez el impacto que tuvieron las redes sociales en los resultados de las elecciones en Estados Unidos en el año 2008, que dio origen a la conocida política 2.0.

En este ejemplo, es necesario sintetizar toda la información que se ha obtenido de todas las fuentes bibliográficas disponibles y evitar divagar en contenido que no sea relevante para lo que se desea tratar. Además, se debe respetar la estructura antes mencionada.

Este es uno de los ejemplos cortos más precisos y que nos permiten comprender con mayor facilidad la monografía.